El punto más importante para el análisis es el RECEPTOR, esto lo sabemos si cogemos el libro y lo leemos. A pesar de la edad que ponga en la contraportada, solamente el maestro conoce a los alumnos y la finalidad que tiene.
El segundo punto es el EMISOR. Este papel lo representa el personaje principal de la obra o aquel con el que se identifica. A veces no existe un emisor claramente identificado, pero entonces el texto será narrativo en primera persona (neutro).
Por tercero tenemos el TEMA, que debe tener intereses reales de los niños.
En cuarto puesto está la ESTRUCTURA, siendo esta la lineal básica (planteamiento-nudo-desenlace) aunque, a veces, pueda tener final abierto, pero esto a los niños no le gusta. Otra estructura es la acumulativa, en la cual, existe una unica acción a la que se van acumulando diferentes personajes y sus variantes. Si se combinan las estructuras ya mencionadas, se crea la estructura más idónea para literatura infantil.
El quinto punto son el ESPACIO y el TIEMPO, en infantil deben ser neutros, es decir sin especificar ("Érase una vez, en un lejano país..."). Si está claramente especificado debe ser algo cercano para el niño.
En sexto puesto estan las ILUSTRACIONES, no deben ser estereotipadas, para que dichas ilustraciones promocionen la creatividad del niño y sean capaces de imaginar. Estas imagenes deben secuenciar de manera clara la historia para que cuando el niño lo vea, sea capaz de recordar la historia que se le ha contado anteriormente.
Por septimo tenemos el LENGUAJE, que debe ser claramente infantil, ajustandose a la manera de la que hablan los niños. Las frases deben ser cortas, simples, siendo el vocabularo lo más ajustado posible, aunque el niño puede no conocer algunas palabras.
Por último, en octavo punto, tenemos los VALORES y CONTRAVALORES, que se reflejan en el personaje principal o cualquiera de los otros.
Perfecto.
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